jueves, 26 de julio de 2012

Visiones de santos y místicos sobre la apostasía del clero

Publico interesante artículo que recibí sobre la apostasía que estamos viviendo, Fray Agrícola.


En la última década hemos sido testigos de la mayor apostasía del clero católico en toda la historia, en lo que se ha dado en llamar el “abuso sexual” o “pederastia”, que tanto ha costado a sacerdotes, laicos y a la institución eclesial. Este pecado es claramente producto de una pérdida de fe. Decenas de sacerdotes abusaron de fieles menores de edad o no, algunas veces protegidos por sus superiores.
Esto no es casual. La apostasía del clero está profetizada por varios santos, místicos y videntes, de los cuales publicamos algunos textos. Pero además en la medida que la lucha entre el maligno y la Virgen (con las huestes de San Miguel Arcángel) arrecie, es lógico que los más atacados sean los sacerdotes, porque son las almas elegidas por Dios para llevar la comunión a la humanidad.
SAN PÍO DE PIETRELCINA
En una carta a su director espiritual:
“En la mañana del viernes, me hallaba todavía en el lecho, cuando se me apareció JESUS. Se hallaba de mala traza y desfigurado. Y me mostró una gran multitud de sacerdotes religiosos y seculares, entre los cuales se hallaban varios dignatarios de la Iglesia. De ellos unos estaban celebrando, otros iban a celebrar y otros habían celebrado. La contemplación de Jesús, así angustiado, me causó mucha pena, por lo que quise preguntarle el motivo de tanto sufrimiento. No obtuve ninguna respuesta. Pero miraba a aquellos sacerdotes, hasta que como cansado de mirarlos retiro la vista y con gran horror mío, pude apreciar que dos lágrimas surcaban las mejillas.”
Se alejó de aquella multitud de sacerdotes con una expresión de gran disgusto y desprecio llamándolos “macellai” (carniceros). Y vuelto hacia mí, dijo: Hijo mío no creas que mi agonía haya durado tres horas; no; yo estaré en agonía por motivo de las almas más favorecidas por mí, hasta el fin del mundo. durante el tiempo de mi agonía, hijo mío, no hay que dormir, mi alma busca una gotita de compasión humana, pero ¡ay! que me dejan solo bajo el peso de la indiferencia. La ingratitud y sueño de mis ministros me hacen más dura la agonía. ¡Ay! que mal corresponden a mi amor.
Lo que más me hace sufrir es que éstos a su indiferentismo añaden el desprecio y la incredulidad. ¡Cuántas veces estaba para acabar con ellos si no hubieran detenido mi brazo los ángeles y las almas enamoradas…! Escríbele a tu Padre, y refiérele esto que has visto y has oído de mí esta mañana.
“Jesús continuó todavía, pero aquello que me dijo no podré manifestarlo a criatura alguna de este mundo. Esta aparición me causó tal dolor en el cuerpo y mayor todavía en el alma que por todo el día sentí una gran postración y hubiera creído morirme, si el dulcísimo Jesús no me hubiera sostenido. Estos nuestros desgraciados hermanos corresponden al amor de Jesús; arrojándose con los brazos abiertos en la infame secta de la masonería. Roguemos por ellos a fin de que el Señor ilumine sus mentes y toque sus corazones.
SOR MARÍA ANGÉLICA MILLET
El sacerdocio entró en el secreto de Satán. La francmasonería sacerdotal.
Respecto del estado de la Iglesia, Sor María Angélica tiene, en 1919, una revelación de Nuestro Señor: “Es horroroso lo que Él me dijo y me muestra la francmasonería sacerdotal. Él estaba tan triste. Triste hasta dejarme ver las lágrimas en sus ojos diciéndome: ‘Yo tengo sacerdotes coaligados contra Mí. El sacerdocio entró en el secreto de Satán, él me libra a su odio y Mi corazón es de nuevo traspasado por él…”
SAN PIO X
Mientras daba una audiencia entró en una somnolencia misteriosa, cuando volvió en sí, exclamó: “Esto que veo es horroroso. ¿Seré yo? ¿Será mi sucesor? Lo que es seguro es que el Papa dejará Roma, y para salir del Vaticano, le será necesario pasar sobre los cadáveres de sus sacerdotes”
Al Canónigo Thellier de Poncheville, San Pio X le dijo: “Todo el mal depende de nosotros, sacerdotes…
BEATA ANA MARÍA TAIGI
El cuerpo de la Beata Ana María Taigi se encuentra incorrupto, en Roma
Oh Roma, Roma. Hijos criminales… Pero cuando Mi Padre Celestial dé la orden… verás como terminará Roma.
El 31 de agosto de 1816, ella oye de Nuestro Señor:
“Oh Roma, Roma. Hijos criminales. ¨¿Ignoráis el bien que os hice?… Tomo nota de vuestra respuesta… Pero cuando Mi Padre Celestial dé la orden… Amada Mía: verás como terminará Roma.”
“Sabe que ahora caen como la nieve las almas en el infierno… que lloren y sollocen amargamente… No se puede llamar ya a Roma la Santa… Tú los ves, lo ves claramente con tus propios ojos… Viven como bestias. Los hombres… No buscan aquí abajo más que el lujo, placeres y satisfacciones… y se dejan llevar de toda clase de deseos culpables… Y muchos se me quejan todavía de no poder llevar el peso de sus miserias. Pero si yo pudiera hablarte… quisiera abrirte Mi Corazón… Me vengaré… en ellos”
Según el Cardenal Sallotti, que tuvo acceso a todas las actas del proceso de beatificación, Nuestro Señor le mostró las tramas de las fuerzas secretas contra el alto clero. En una ocasión Él le dirigió palabras de fuego contra los sacerdotes que contaminaban los altares. Ella vio también el futuro castigo y al fin el triunfo de la Iglesia; Dios quiere purgar la tierra y su Iglesia, para lo cual está preparando una plantación nueva de almas desconocidas que operarán grandes y sorprendentes milagros (Mons. Sallotti, págs. 300-340).
UN TESTIMONIO INESPERADO (1879)
En un exorcismo, el 14 de febrero de 1879, el demonio se vio obligado a declarar: “Desde el Pontificado de Pío IX la Iglesia entró en una nueva fase de dolorosas pruebas. La Iglesia Militante tendrá que sufrir siempre un doble mal: exterior, por la persecución de sus enemigos; interior por la perversión de sus miembros. Desde Pío IX ese doble mal creció continuamente, debido a un asalto extraordinariamente fuerte sobre la tierra por parte de los espíritus infernales.”
Después dijo: “Yo tengo más servidores que la Virgen de ustedes. Para ustedes — agregó — Ella es toda misericordia, para nosotros terrible; más terrible que su Hijo” ( Victoria de la Inmaculada — Relatos de exorcismos, Viena, 1968, págs. 22 y ss.)
SANTA GEMA GALGANI
Santa Gema: “Son necesarias víctimas para impedir el gran castigo que nos amenaza”.
En la fiesta de Pentecostés, el año 1902, la santa tuvo una visión: Nuestro Señor le mostró la desgraciada situación de la Iglesia y de sus ministros. Un año antes, en 1901, Nuestro Señor le había dicho (octubre de 1901): “Hija Mía, que de ingratitud y malicia hay en el mundo! Los pecadores viven impenitentes y endurecidos en sus faltas. Mi Padre no puede soportarlos más. Las almas viles y débiles no hacen ningún esfuerzo para dominar la carne, las almas afligidas se desconciertan y desesperan; las almas fervorosas se entibian cada vez más; los servidores de Mi Santuario…; la indiferencia crece día a día y nadie se corrige”.
En un éxtasis – místico, en mayo de 1901, Santa Gema oyó a Nuestro Señor:
“Yo tengo necesidad de una gran expiación, sobre todo por los pecados y sacrilegios con los cuales me ultrajan los Ministros de Mi Santuario. No eran los ángeles que rodean Mi altar, cuantos Yo hubiera ya aniquilado”.
Ella se ofreció como víctima y murió el sábado Santo de 1903 (cfr. B. Sánchez, págs. 86-87).
SAN BENITO JOSÉ LABRÉ
Al respecto de la crisis de la Iglesia católica.
“Benito — cuenta el P. Marconi, su confesor — me ha hablado también de otras visiones que él tenía, mas siempre para acusarse como tentaciones. Así, él me ha expuesto que veía en fuego ya un lugar, ya otro, de aquellos donde había pasado en sus viajes por Francia… mas los hechos han bien probado que en lugar de tentaciones eran ilustraciones divinas representando en su espíritu el porvenir, bajo la forma de incendios que consumían ora un lugar, ora otro… yo debo acrecentar que más de una vez él me expone que me veía a mí y al Santísimo Sacramento, como cubierto de inmundicias, y diciéndolo, las lágrimas le corrían de los ojos. Él me repite aún estas palabras en su última confesión, y él terminaba siempre diciendo que ‘la sola penitencia’ podía desarmar la cólera de Dios… Me parece que yo no me alejaría mucho de la verdad si el ‘vous’ que usaba entonces el santo dirigiéndose a mí, se tomaba no como personal, mas como calificativo, de suerte que él hubiera querido hablar, no de mi persona en particular, mas en general de los sacerdotes que él veía cubiertos de inmundicias, para significar lo que sucedería en Francia en el orden sacerdotal, sea en lo físico, sea en lo moral”.
Eleonora Mazza, abadesa de Monte Lupone, cuenta en carta al P. Marconi, después de la muerte de San Benito, que él hizo saber a las religiosas del monasterio de Santa Clara en Verona “que la Iglesia estaba amenazada de males más grandes aún que aquellos que la afligían y que él no los vería”
SAN LUIS M. GRIGNION DE MONTFORT
“Desolatione desolata est omnis terra; la impiedad está sobre un trono; vuestro santuario es profanado, y la abominación entró hasta en el lugar santo…” ( Tratado de la Verdadera Devoción…, pág. 303).
VENERABLE BARTOLOMÉ HOLZHAUSER
Sobre la crisis de la Iglesia dice:
“Dios dejará libre curso a su cólera ya anunciada, incluso en otras partes. No quedarán más que pocos hombres, los reinos serán destruidos, los principados serán aniquilados, las repúblicas disueltas, las gentes distinguidas rebajadas y casi reducidas a la mendicidad. El ‘tigre’ afligirá a la Iglesia y sobre la Tierra reinarán la más grandes de las miserias, una miseria que lanzará por todos lados la confusión”
SANTA BRÍGIDA DE SUECIA
Nuestro Señor reclama a Santa Brígida por el estado de la Iglesia e incluso amenaza con irse a los paganos, abandonando a los cristianos y castigándolos. Extractos de una de sus visiones y conversaciones con Nuestro Señor:
“Delante de todo el ejército celestial el Padre Eterno dice: ‘Me quejo delante de vosotros de que desposé a Mi Hija con un hombre que la trata muy mal, y le sujeta los pies en un cepo, hasta que se le secan y quedan extenuados’. Respondió el Hijo: ‘Esa es, Padre Mío, la que Yo redimí con Mi Sangre, y recibí por Esposa, pero que ahora tratan de arrebatármela violentamente’. Enseguida, dijo la Santísima Virgen: ‘Vos Padre Eterno, Sois Mi Dios y Mi Señor, y traje en mis entrañas a Vuestro Bendito Hijo, que es verdadero Hijo Vuestro y verdadero Hijo mío. Mientras viví en el mundo hice vuestra voluntad, hacedme merced de apiadaros de Vuestra Hija’. Después decían los ángeles: ‘Vos Sois nuestro Dios y Señor, y en Vos tenemos todo nuestro bien, y no necesitamos otro que a Vos. Cuando nació Vuestra Hija la Iglesia, todos nos alegramos, y ahora con razón podíamos entristecernos porque la vemos en manos de quien tan vil y afrentosamente la trata, compadeceos de Ella por vuestra gran misericordia, pues es mucha su miseria, y no hay quien la consuele, ni la libre, sino Vos, Señor Dios Omnipotente…’” (Celestiales revelaciones…, págs. 61-62).
SAN PEDRO CELESTINO
Dice lo siguiente: “Antes que la Iglesia sea renovada, Dios permitirá que el trono de San Pedro sea vacante”.
PROFECÍAS DE SANTA HILDEGARDA
Sobre la crisis religiosa en la Iglesia y la restauración del orden cristiano:
“Que la justicia, la honestidad de las costumbres y la dignidad de las virtudes restauradas por los profetas después del diluvio hasta la venida de Jesucristo, y después de ellos por los apóstoles y doctores de la Iglesia, que brillarán por mucho tiempo, se depravarán en lo sucesivo: pero que después de aquellos días malos recobrarán su antiguo brillo entre los hombres antes del fin de los tiempos y después de grandes tribulaciones”
Castigo de Dios sobre los malos pastores:
“Tomando a su cargo la causa de la justicia, el soberano Juez castigará a los prevaricadores y, sobre todo, a los malos pastores de la Iglesia, permitiendo que se les despoje de sus bienes temporales, antes de reducirlos por medio de las tribulaciones. Purificado por fin con tantas pruebas, cada orden, eclesiástica y seglar, recobrará su fervor y dignidad primera”
SOR MARIANA DE JESÚS TORRES
“El ángel de la guardia le dice: ‘Vendrán tiempos amargos en que se habrá dejado el Oficio Parvo, y se habrá debilitado el espíritu. ¡­Ay! de aquellos que hayan tomado parte en esto’”
Nuestra Señora del Buen Suceso: “Este Monasterio será muy perseguido en los siglos venideros, llegando la persecución al extremo de atentar contra la vida de mis hijas. No consiguiendo eso, trabajarán con tenacidad infernal, por su extinción, valiéndose de religiosos y de la autoridad Superior. Sin embargo, como nada pueden los hombres contra las obras de Dios tendré en este mismo solar hijas dignas de mi amor”.
Nuestra Señora le anuncia la total decadencia de la fe a fines del siglo XIX hasta más allá de la mitad del siglo XX:
“Al finalizar el siglo XIX y hasta un poco más de la mitad del siglo XX, en la hoy colonia, y en la entonces República del Ecuador se desbordarán las pasiones y habrá una total corrupción de las costumbres por reinar Satanás en las sectas masónicas, las que tenderán principalmente a corromper a los niños de estos tiempos, el sacramento del Bautismo lo recibirán difícilmente, la Confirmación de igual manera, el sacramento de la Penitencia solo cuando permanezcan en las escuelas católicas, las que pondrá el diablo todo empeño para destruirlas valiéndose de pésimas autoridades , el de la Comunión de igual manera.

martes, 24 de julio de 2012

San Agustín, La Ciudad de Dios 1


     " La gloriosísima ciudad de Dios, que en el presente correr de los tiempos se encuentra peregrina entre los impíos viviendo de la fe, y espera ya ahora con paciencia la patria definitiva y eterna hasta que haya un juicio con auténtica justicia, conseguirá entonces con creces la victoria final y una paz completa. Pues bien, mi querido hijo Marcelino, en la presente obra, emprendida a instancias tuyas, y que te debo por promesa personal mía, me he propuesto defender esta ciudad en contra de aquellos que anteponen los propios dioses a su fundador. ¡ Larga y pesada tarea ésta! Pero Dios es nuestra ayuda.
      Soy consciente de la fuerza que necesito para convencer a los soberbios del gran poder de la humildad. Ella es la que logra que su propia excelencia, conseguida no por la hichazón del orgullo humano, sino por ser don gratuito de la divina gracia, trascienda todas las eminencias pasajeras  y vacilantes de la tierra. El Rey y fundador de esta ciudad, de la que me he propuesto hablar, declaró en las Escrituras de su pueblo el sentido de aquel divino oráculo que dice: Dios resiste a los soberbios, y da su gracia a los humildes. Pero esto mismo que es privilegio exclusivo de Dios, pretende apropiárselo para sí el espíritu hinchado de soberbia, y le gusta que le digan para alabarle: " Perdonarás al vencido y abatirás al soberbio."
      Tampoco hemos de pasar por alto la ciudad terrena en su afan de ser dueña del mundo, y aún cuando los pueblos se le rinden , ella misma se ve esclavada de su propia ambición de dominio. De ello hablaré según lo pide el plan de la presente obra y mis posibilidades lo permitan."
                  CAPÍTULO 1
    "   De esta ciudad terrena surgen los enemigos contra quienes hay que defender la ciudad de Dios. Muchos de ellos, apartándose de sus errores impíos, se convierten en moradores bastante laudables de esta ciudad. Otros muchos, en cambio, se están abrasando en un odio tan violento contra ella, y son tan ingratos a los evidentes favores de su Redentor, que éste es el día en que no serían capaces de mover su lengua contra esta ciudad si no  fuera porque encontraron en sus lugares sagrados, al huir de las armas enemigas, la salvación de su vida, de la que ahora tanto se enorgullecen. ¿ O es que no son enemigos encarnizados de Cristo aquellos romanos a quiénes los bárbaros, por respeto a Cristo les perdonaron la vida? Testigo son de ellos los santuarios de los mártires y las basílicas de los apóstoles, que en aquella devastación de la gran urbe acogieron  a cuantos en ella se refugiaron, tanto propios como extraños. Allí se moderaba la furia encarnizada del enemigo; allí ponía fin el enemigo a su saña; allí conducían los enemigos, tocados de benignidad , a quienes, fuera de aquellos lugares, habían perdonado la vida, y los aseguraban de las manos de quienes no tenían tal misericordia. Incluso aquellos mismos que en otras partes, al estilo de un enemigo, realizan matanzas llenas de cruedad, se acercaban a estos lugares en los que estaba vedado lo que por derecho de guerra se permite en otras partes, refrenaban toda la saña de su espada y renunciaban al ansia que tenían de hacer cautivos.
  De esta manera han escapado multitud de los que ahora desacreditan al cristianismo, y achacan a Cristo las desgracias que tuvo que soportar aquella ciudad. En cambio, el beneficio de perdonárles la vida por respeto a Cristo no se lo atribuyen a nuestro Cristo, sino a su destino. Deberían más bien, con un poco de juicio, atribuir los sufrimientos y asperezas que les han inflingido sus enemigos a la Divina Providencia, que suele acrisolar y castigar la vida corrompida de los humanos. Ella es quie pone a prueba la rectitud y la vida honrada de los mortales con estos dolores para, una vez probada, pasarla a vida mejor, o bien retenerla en esta tierra con otros fines."
 
    Comentario: San Agustín da cuenta de un hecho histórico que esconde un misterio muy especial. Una vez caído el Imperio Romano a través de las invasiones bárbaras, resulta que estos individuos poco civilizados respetan por un misterio muy profundo de Dios los lugares santos. A tal extremo llega su respeto, que deciden perdonarle la vida a aquellos romanos refugiados en estos santuarios.
     Pero como todo pagano jamás va agradecer a Dios como la fuente de su vida, si no le va a atribuir su fortuna al destino. Sin embargo, Dios actúa con su manos providente aún con aquellos incrédulos para que se conviertan a la fe verdadera, a pesar del dolor y la persecusión. La mano providente de Dios tenía un plan trazado para su Iglesia naciente.
                   
   La Ciudad del Mundo:           
         ¿ Vale la pena perder el alma por la belleza de una mujer? Aunque ustedes no lo crean, si le hago esta pregunta a un grupo importante de hombres la respuesta sin duda va a ser afirmativa. Ciertamente, la respuesta estará dada por factores hormonales más que reflexivos. Es tan fuerte la imagen seductora de la mujer, que a muchos los lleva a la locura. Por una mujer hermosa se abondonan hijos, mujer y bienes. Se es capaz de sacrificar las convicciones morales más profunda frente al irresistible seducción de una mujer hermosa. La mayoría de ustedes conoce el caso de Mel Gibson, un hombre conocido por su catolicismo tradicionalista. Mel hizo la película más hermosa e impactante que se haya extrenado en la pantalla grande, sobre la  pasión de Nuestro Señor Jesucristo.
    La Pasión de Cristo constituye un verdadero apostolado católico. Sin embargo, su productor y director fiel defensor de la ortodoxia cedió a los pecados más fuertes de la carne. Abandonó a 7 hijos, a su señora y peor aún, renegó con sus actos a sus propias convicciones. De que la carne tira, la verdad es que tira muy fuerte. Cristo nos advierte que si alguien consiente con el corazón el deseo carnal hacia una mujer, ese ya pecó gravemente. Frente a estas advertencias de Cristo sobre el simple deseo, un amigo hoy me dijo que la doctrina católica es un verdadero Karma. Y me pregunta seriamente ¿ Qué es preferible? que se mire y desee una mujer o que se siga un proceso similar pero con un hombre. ¿ Cómo puede el cristianismo atentar contra la propia naturaleza?, ¿ Cómo puede esta religión anular el deseo natural de un hombre?, si esto es así, entonces todos los hombres pecan, dice mi amigo, porque no creo que un hombre normal escape a la seducción de la belleza femenina.
    San Benito de Nurcia, tuvo una tentación carnal muy fuerte, frente a tal estímulo decidió para no pecar mortalmente, lanzarse a una zarzamora y flajelar las partes del cuerpo que más le inducía a pecar, se frageló especialmente la parte de sus genitales. Yo me pregunto, ¿ Cuántos San Benito harían lo mismo ahora? Tal vez me dirán, eso era sólo para Benito ya en estas actuales condiciones del mundo nadie lo podría seguir. Primer problema frente a esta posición, la doctrina católica es muy clara al respecto, los pecados son siempre los mismos, independientes en la época que se realicen. El simple deseo consentido ya es un pecado grave que expone al alma al infierno eterno.
    Cristo Nuestro Señor es muy tajante, el que quiere seguirlo tiene que abandonarlo todo, tiene que renegar su propia naturaleza. No puede haber ningún obstáculo entre la creatura y su creador. Vivir católicamente siguiendo la Ciudad de Dios implica necesariamente renunciar a la Ciudad del mundo. Y el primer obstáculo que hay que saltar para seguir la Ciudad de Dios es la seducción carnal. De hecho la propia Vírgen de Fátima les comunica a los tres pastorcitos que los pecados que más llevan al infierno son los pecados carnales.
   ¿ Cómo se puede aprender a renunciar a los pecados de la carne? Abadonando toda nuestra confianza en las manos de Dios. Acercándose frecuentemente al sacramento de la confesión y evitando exponerse en situaciones donde se estimule la imaginación u otro tipo de sentido relacionado con lo carnal. ¿ Es fácil seguir este camino? La verdad es que no. Si bien, no todos sienten del mismo modo la intensidad por los placeres de la carne- de hecho en algunos son mucho más intensos- sin embargo, la gracia de Dios, si se la pide con confianza y amor logra suplir todas las deficiencias humanas. Tal vez este proceso en algunos sea corto o tal vez en otros largo, y a lo mejor en algunos puede durar toda su vida. Pero no se puede acceder a Dios, sin haber abandonado la ciudad del mundo. ¿ Pero si los curas son los primeros en caer en esta clase de pecados? Puede ser, pero no seremos juzgados por los pecados de los curas, sino por nuestras propias acciones y omisiones.
    Si uno se pusiera a pensar objetivamente y sin ningún tipo de apasionamiento se daría cuenta que esta belleza femenina tan seductora es falsa y engañosa. ¿ Cuánto le puede durar la belleza a una mujer? Veinte años, treinta años, cuarenta años y después ¿qué?. Después le vendrán las arrugas, las canas, las enfermedades y finalmente cuando muera se la comeran los gusanos. Mientras que el infierno es eterno. Es para siempre siempre. Es un lugar de dolor y desesperanza cuyo sufrimiento no tendrá fin. A pesar de nuestras cavilaciones, la imagen seductora de una mujer sigue siendo una gran tentación. Tan fuerte es su atracción en el hombre, que San Pablo exhorta a la mujer a utilizar el velo en el lugar santo, vale decir, en la iglesia y en la misa.
   La misma tentación que le ocurre al hombre, sin duda, le ocurre a la mujer. Por algo ambos arriesgan su felicidad futura al dar rienda suelta a sus pasiones. Lo curioso de todo esto, que quien escribe la ciudad de Dios, vivió por muchos años seducido por la tentación carnal. Sin embargo, el rezo ante Dios de una mujer como su madre dió los frutos esperados. La gracia actúo, y Agustín se arrepintió a tal extremo que decidió a renunciar a su propia naturaleza.
   La idolatría de lo carnal, termina interponiéndose en definitiva para que el alma alcance sus perfecciones cristianas. La oración de una mujer fue suficiente para la conversión de un hombre pecador. Por lo tanto, tal vez sea el camino si es que de verdad se quiere ir al cielo pedirle a Santa Mónica, madre de San Agustín, ora pro novis.
   
      

     

lunes, 23 de julio de 2012

A modo de post, respuesta de Übersetzer a G. Chester y comentario del Fraile

Atardecer Playero

Estimado Chester,
El mundo actual nos incita permanentemente a ser dueños de nuestra vida, a buscar nuestra felicidad, a ejercer nuestra libertad de decidir qué nos conviene. Sin embargo, este llamado se vale de nuestros instintos, nuestros sentimientos y nuestras necesidades inmediatas, manipulándonos hacia la soberbia y el consumismo, y haciéndonos olvidar todo aquello que nos exige dejar lo material en segundo plano para optar por lo que hace bien al alma, por el bien superior al cual nuestro espíritu debiera tender naturalmente.
Claro que todos buscamos nuestra felicidad y la satisfacción de nuestras necesidades, pero el hombre de hoy es manipulado, tironeado por distintas fuerzas que lo llevan a olvidar su aspecto espiritual, cambiando su inclinación natural a hacer el bien, por hacer lo que resulta bueno para él – aunque ello implique pasar por sobre los demás,vulnerando los derechos de las otras personas si aquellos resultan un obstáculo para ‘nuestro bien particular’. El mundo actual incita al hombre a la soberbia de creer poder controlar no solo la naturaleza y la ciencia, sino a los otros hombres. Todo lo que nos haga felices está permitido, pero aquello que nos impone restricciones (como la religión, por ejemplo) debe ser desdeñado: no debemos sentirnos culpables, ni privarnos de lo que nos apetece, en la medida que lo consideremos un bien para nosotros.
Pero no somos solo instinto y apetito. Lo que nos hace humanos es nuestra racionalidad, el saber que somos algo más que nuestros hermanos menores los animales; nuestro espíritu anhela lo trascendente. Nadie, sin importar los bienes que posea, cuantos placeres pueda satisfacer, cuanto poder crea tener, puede ser realmente feliz si no busca (ydescubre, aunque en parte) aquello que nos hace realmente seres humanos: el cultivo de las virtudes para ser cada día mejores personas, para intentar amar a todos como hermanos con los mismos derechos y dignidad, para acercarnos cada vez más a Dios. Es verdad que aquello supone sacrificios, auto-control, una profunda humildad, y la confianza total en que en la medida que sigamos a Dios nada nos faltará. Estamos, entonces entre dos fuegos: la sociedad actual nos tira hacia abajo, hacia lo material, lo inmediato que nos satisface en cuanto ‘materia’,mientras que nuestra ‘forma’, lo que nos hace humanos y no meros animales, nos llama incesantemente a buscar a Dios – y ¡con qué fuerza nos tapamos los oídos para no oír esa voz interior, si es tanto más fácil dejarse llevar por el mundo!
Por lo mismo considero que debemos disciplinar la voluntad en los quehaceres humanos para que, al momento de optar por el bien, por lo trascendente, la autodisciplina resulte más natural y no surja tan espontáneamente esa rebeldía que busca complacer los sentidos como bien inmediato.
Nuestro amigo el Fraile dice que los cristianos no somos de este mundo. Pero salvo algunas excepciones, no somos ascetas. Estamos inmersos en este mundo, y si queremos acercarnos al Cielo,  debemos primero aprender a vivir en nuestra sociedad dando ejemplo de vida cristiana; mostrandoque esta vida no nos es ajena para nada. ¿De qué sirve quejarnos de la maldad del mundo, criticar la sociedad, alejarnos de quienes nos parecen tan despreciables, y fijarnos en la paja del ojo ajeno, si no vemos nuestros propios enormes defectos, no hacemos nada por cambiar el metro cuadrado en que nos movemos, no enseñamos a quien lo necesita que hay otras prioridades, que se puede aspirar a algo más que a satisfacer nuestros sentidos? No veo tan grandeesa separación  entre lo espiritual y lo terreno. Estamos aquí de paso,caminando, perfeccionándonos, rodeados por personas que tal vez no tuvieron nuestra suerte de conocer la existencia de Dios y nuestra formación valórica. 
Si bien algunos poseen mayores riquezas que otros, o mayor formación académica,o simplemente viven en la más profunda pobreza pero tuvieron la fortuna detener a Dios en su corazón, todos recibimos ciertos talentos, y se nos pedirá cuenta por el provecho (espiritual, claro) que cada uno a su medida saque de lo que le fue dado. Nosotros no somos nadie para juzgar al prójimo. Con profunda humildad, sea lo que sea en que nos encontremos, pidamos a Jesús la ayuda para poder seguir sus pasos y dar testimonio de vida cristiana; cada instante se puede tornar en oración, en puntos para LA ÚNICA cuenta de ahorro que cuenta.

Saludos,
Übersetzer

     Comentario del Fraile:
       Voy a citar unos párrafos del libro PUSILLUS GREX, que representan a cabalidad mi pensamiento sobre este tema:
      " Me llama profundamente la atención que aún creas eso de que hay que salir a abrasar al mundo, que hay que amarlo y santificarse en él. ¿ No será al revés la cosa? Yo diría que hay que santificar al mundo, precisamente no siendo parte de él ni sus necedades, ni de sus modas blasfemas, ni de su materialismo, ni de su inmanentismo, ni de sus ansias de progreso ( ¿ a dónde? ¿ Hacia dónde nos lleva el progreso indefinido? ¿ a sentirse que ya se es maduro y que no se necesita a Dios?). De hecho este invento de santificarse en el mundo es un absurdo y contradice toda la enseñanza tradicional de la Iglesia. Me explico: Tres son los enemigos del alma: La carne, el demonio y el mundo. ¿ Por qué, sigo preguntándome, se les ha metido a los católicos liberales como tú esta idea de que el mundo es bueno, que no hay que rechazarlo, que hay que comprenderlo? Vaga mentira. Desde el mismo momento que comienzas a amar al mundo, dejas de amar a Dios, no te engañes: quien ama apasionadamente al mundo, deja de amar a Dios. Desde siempre Dios ha sido celoso de su amor por El, del amor para con él, por lo que exige exclusividad en el buen sentido de la palabra; y, por lo demás, no se puede amar a dos señores. San Agustín habla de las dos ciudades: " Dos amores fundaron dos ciudades, el amor a sí mismo hasta el desprecio de Dios, funda la ciudad del hombre; y el amor de Dios hasta el desprecio de sí mismo funda la ciudad de Dios."  No puedes fundar una sin despreciar a la otra. No puedes amar locamente al mundo, sin dejar de despreciar a Dios. Si amas a Dios despreciando al mundo, éste último sí podrá santificarte porque habrás vuelto a la fuente desde donde todo procede instaurando todas las cosas en Él. Dice San Juan:  " No améis al mundo, ni a las cosas que están en el mundo, el amor de mi Padre no está en él." (1 Juan,2,15). El mundo corrompe. Cristo siempre habla del príncipe de este mundo, de que su Reino no es de este mundo. Acuérdate que para seguir a Cristo hay que abandonarlo todo, eso lo han comprendido bien los grandes santos enamorados de Dios. Lo han dejado todo para seguirlo y por eso su grado de santidad es más perfecto que el que podamos tener nosotros. Abandonar familia, posición social, comodidades, lo que se te ocurra...tus gustitos personales, implican la renuncia a ellos y por tanto lleva consigo una pérdida y las pérdidas desde el punto de vista meramente humano, la mayoría de las veces son dolorosas. Si estás dispuesto a perder todo eso que amas del mundo, ¿ acaso no tiene un mayor mérito delante de Dios que quedarse diciendo que en el mundo y en sus cosillas también puedo ser santo?  Lo que pierdes del mundo lo ganas de Dios, y El no te dejará sin su recompensa. Siempre te lo repito una y otra vez: estamos en el mundo pero no somos del mundo."  Paula Aguirre M., Pusillus Grex , págs 162-163.
        La cita anterior corresponde a la novela apocalíptica Pusillus Grex. Aquí el personaje principal de la novela le responde  mediante una carta a su hermano en los términos antes descritos. Evidentemente no todos podemos ser ascetas, pero eso no impide de tratar de renunciar a muchas cosas que atentan contra la fe y el orden establecido por Dios. Lo que no significa que miremos la paja en el ojo ajeno sin ver la viga en la propia. Vemos nuestras propias vigas y la de los demás, y decimos que si seguimos en este camino será imposible nuestra santificación, si no estamos dispuestos a esa renuncia total que nos exige Dios.
        Claramente no todo es malo en el mundo. Exiten paisajes bonitos, ciudades hermosas, etcétera. Pero de allí a desear y abrazar las costumbres mundanas, las blasfemias de los hombres, los gustos groseros, el culto al cuerpo y a cuanta cosa anda dando vueltas por ahí, eso es otra cosa.
Saludos,
Fray Agrícola
    

domingo, 22 de julio de 2012

C. S. Lewis: La abolición del hombre 2


         " San Agustín define la virtud como ordo amoris, la ordenada condición de los afectos en que se le otorga a cada objeto el tipo y grado de amor que le corresponde. Aristóteles dice que el fin de la educación es conseguir que el alumno tenga predilecciones y aversiones por lo que corresponde. Cuando llega la edad del pensamiento reflexivo, el alumno que se ha ejercitado de esta forma en " afectos ordenados" o " sentimientos justos" descubrirá con facilidad los primeros principios de la ética; pero el hombre corrupto nunca los podrá ver y no podrá progresar en esta ciencia. Platón ya había dicho lo mismo. En un principio el pequeño animal humano no tendrá las respuestas exactas. Se le debe ejercitar para sentir placer, predilección, aversión y odio por las cosas que realmente son placenteras, agradables, desagradables y odiosas. En la República, el joven bien educado es el " que vería con mayor claridad cualquier error en trabajos mal hechos de un hombre o en obras mal terminadas de la naturaleza; con justa aversión culparía y odiaría lo feo incluso desde sus primeros años, y haría entusiastas alabanzas a lo bello, recibiéndolo en el alma y alimentándose con ello, para convertirse en un hombre de buen corazón. Todo esto antes de encontrarse en edad de razonar, de modo que cuando finalmente llegue a él la razón, entonces, educado de esta forma, estrechará sus manos para darle la bienvenida y reconocerla, ya que percibe su afinidad con ella" C.S Lewis, La abolición del hombre, Ed. Andrés Bello, pág 24-25
           Lewis, como buen hijo Oxford tiene sobre sus espaldas a tres gigantes autores como son: Platón, Aristóteles y San Agustín. Siempre para llegar a la raíz de un problema, se debe llegar a la definición más próxima sobre lo que se quiere indagar. En este caso, Lewis enlaza la definición de virtud y su relación con la educación. La educación busca conducir al alumno al conocimiento de la verdad. Por ello, para enseñar siempre se debe distinguir entre lo bueno y lo malo, entre lo verdadero y lo falso, entre lo que es erroneo y lo que se ajusta a la verdad.
   Como el hombre se define por su razón, por su inteligencia , es menester formarlo en sus habilidades cognitivas siempre subordinadas hacia el bien sobre el cual le compete cumplir en la sociedad. Toda educación debe estar anclada necesariamente sobre la ética. Una educación sin ética, no es educación, es sólo formación especializada sobre una habilidad técnica del hombre, y no sobre el fin o el rol que el hombre debe cumplir en una determinada sociedad.
   Amordazar la inteligencia al sentimiento instintivo del ser humano es conducir al hombre hacia el estado prehistórico de las cavernas. Un hombre que basa su razón de ser en sus destrezas para pelear y agredir a sus semejantes es similar a las bestias. De hecho, debería ser tratado como uno de sus pares. Cualquier animal puede ser bueno para la pelea, pero ningún animal puede reflexionar, ningún animal piensa filosóficamente, ningun animal tiene una historia que aprender, ningún animal tiene una música que tocar, ya que ese lugar esta ocupado sólo por el hombre.
    Educar al hombre es en estricto rigor volverlo más hombre. Ejercitar la inteligencia para instruirla en el amor a la verdad y al bien es la base de cualquier sistema educativo que quiera alcanzar madurez y desarrollo en el largo plazo. Alejarse de esta estructura es renunciar a ser formador de hombres. No nos olvidemos que Lewis era profesor de literatura, él amaba las letras, su espíritu se robustecía con el saber humanista.  Siempre que se desee educar de verdad se debe tener en cuenta que la educación obedece a una vocación por parte del educador. Sobre esta base permanece el amor.
     No se puede educar sin amor. Amor a la verdad, amor al prójimo, amor de dar todo nuestro ser para comunicarle a otros lo mejor de nosotros. De hecho no cualquiera puede ser profesor. Para ser profesor no hay que ser un mercenario que lo único que piense es en lucrarse de los beneficios de sus alumnos.
    Aristóteles decía que un buen maestro es aquel logra hacer que su discípulo sea semejante a él.  Amar es dar. Dar parte de lo mejor de nosotros para comunicárselo a otros que no han corrido nuestra misma suerte . En teoría debieran estar los mejores en la enseñanza de los alumnos. Desde el momento que no están los mejores en la transmisión del conocimiento, la sociedad tarde o temprano va acusar las deficiencias del sistema educativo. La ecuación es muy fácil de plantear:                       Malos profesores = malos alumnos.  No se puede construir un gran edificio sobre bases débiles. ¿Cómo pueden aprender los alumnos a reflexionar bien si su propio profesor no es reflexivo?, ¿ Qué clase de enseñanza se desea impartir cuando el profesor no tiene un conocimiento versado de las materias?.
     Todo proceso educativo pasa por la calidad de las personas, por mucho que se impongan políticas gubernamentales contrarias al bien común y al conocimiento de la verad. Sin embargo, el buen maestro siempre pondrá todas las barreras que sean necesarias a fin de evitar de hacerles daños a sus propios alumnos.
   La utilización mercantil de la educación es un recurso muy habitual de las sociedades modernas. El negocio es capaz de sacrificar la enseñanza de la verdad y del bien. Una educación basada en el negocio jamás va a permitir que sus alumnos sean reflexivos. Crear oponentes al sistema, como lo serían gente pensante es algo intolerable para quienes sostienen la educación actual.
  La crisis del sistema educativo que lleva a la abolición del hombre, obedece a una planificación de ciertos poderes fácticos que se enriquecen grandemente con la neutralización del pensamiento reflexivo de los individuos. El objetivo central de la nueva " educación" es formar a hombres masas que tengan los mínimos conocimientos a fin de que sean manipulados de un  extremo al otro en cuanto a las ideas, sin que este prototipo abyecto de hombre lo perciba.
   Animales de manipulación será el prototipo de hombre que vislumbra Lewis. Al hombre del siglo XXI sólo le interesa saciar su apetito voraz de obtener bienes de consumo sin que nadie lo detenga. Para ayudar a tales ciudadanos, el sistema de crédito por tarjetas bancarias y casas comerciales es el instrumento que le permite saciar sus gustos.
    ¿ Quien podrá salvar al hombre de su propio suicidio educativo? Sólo lo podría salvar Dios. Pero este hombre moderno no quiere saber nada de su Creador. Su visión filosófica de la vida es agnóstica. No le interesa adquirir una serie de reglas que limiten su propio individualismo. ¿ Para qué Dios si por culpa de Él se produjeron muchísimas guerras en el pasado? Este hombre quiere la paz, pero la paz para demoler todos los obstáculos que puedan existir en la sociedad para mermar su libertad omnipotente. Libertad para todo, menos para el bien y el culto a Dios.
    Si Lewis viviera se daría cuenta que su crítica estaba basada sobre la punta del iceberg de una demolición filosófica del hombre trascendente, para luego construir a un hombre fundado sobre su inmanencia. En tal proceso no cabe la ingenuidad, sino más bien el dolo de los que manipulan esto subrepticiamente. ¿ Hacia adónde va finalmente el hombre? La respuesta es clara: hacia su propio endiosamento, a la construcción nuevamente de la Torre de Babel, donde el ser humano construirá la felicidad en este mundo fundado en la diosa libertad. ¿ Y cuál será la consecuencia de todo este proceso revolucionario de la educación? Lamentablemente todo terminará en la gran confusión al igual como ocurrió en el tiempo de la Torre de Babel. No se entenderá nada de lo que sucede, reinará el caos y gobernarán los malos.
   ¿ Cómo se puede luchar entoces frente a este maremoto de oscuridad? En particular creo que la lucha se debe dar de manera intelectual o si se quiere, se debe partir combatiendo el error de las ideas liberales. La  base para recontruir la civilización decadente es la afirmación contra viento y marea que la Verdad es una. Dicha Verdad es permanete e inmutable. Se debe afirmar que la Verdad nunca puede cambiar.  La verdad es excluyente, es discriminatoria, apunta al error como un mal, y al bien como el objeto hacia el cual deben ordenarse todas nuestras apetencias.
  La crisis mundial del sistema educativo es la prueba palpable que existe una demolición planificada de la educación por los que gobiernan en el silencio de nuestras sociedades. No es casualidad que en todos los países del orbe civilizado se formen a los individuos sobre la base de la mordasa intelectual como es la exacerbación de lo emocional.
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viernes, 20 de julio de 2012

C.S.Lewis La abolición del hombre

    Sin lugar a dudas, la educación de los niños fue un tema preocupante para Lewis. Él perteneció al antiguo sistema educativo tradicional británico. En dicho sistema se le daba mucha importancia a las lenguas muertas tales como el griego y en especial el latín. La mayoría de la gente de clase alta había sido educatada en internados. El fin de la educación inglesa para las clases medias y altas era obtener gente instruída en las distintas áreas del saber tales como la filosofía, teología,poesía, astronomía, matemática y física.
   Pero como los objetivos de la educación fueron cambiando en parte por el modelo del utilitarismo inglés, la educación se fue centrando en un modelo más pragmático y menos humanista. La instrucción escolar y universitaria tal como la había conocido Lewis fue desviándose hacia un modelo menos rigorista y más técnico del saber.
    ¿ Para qué llegar al conocimiento de la verdad? Eso quedó en el pasado, lo que ahora importa es centrarnos en modelos económicos que nos permitan obtener ganancias inmediatas para mejorar nuestra calidad de vida. ¿ Para qué reflexionar?¿ Para qué la teología? ¿De qué nos sirve Dios en nuestro modelo funcional de sociedad dónde todo avanza hacia un ,mayor bienestar de la sociedad? Ya no es necesario enseñarles a los niños a pensar, sino que hay que enseñarles a utilizar más sus emociones. Queremos gente que viva de sus emociones, no importa el contenido de tal o cuales materias. Si el fin es generar individuos funcionales y altamente eficientes en labores específicas y restringidas del quehacer humano.
    Dejemos que el mismo Lewis nos lance su crítica :
         " En otro librito, a cuyo autor llamaré Orbilio, se realiza la misma operación y con el mismo anestésico general. Orbilio elige " desacreditar" un fragmento ridículo acerca de caballos, en que se alaba  a estos animales por ser " los sirvientes voluntarios" de los primeros colonos en Australia. Y cae en la misma trampa que Gayo y Tito. Nada dice de Rusksh y Sleipnir ni de los llorosos corceles de Aquiles, ni del caballo de guerra del libro de Job-ni siquiera del Hermano Rabito ni de Pedro Conejo- ni de la piedad prehistórica del hombre por "nuestro hermano el buey2; nada, en fin, de todo lo que ha significado el trato semiantropomórfico de las bestias en la historia humana ni de la literatura en que se halla expresión noble y aguda. Tampoco se refiere a los problemas de psicología animal tal como los considera la ciencia. Se conforma con explicar que los caballos no están, secundum litteram, interesados en la expansión colonial. Esta informaciónes, en realidad, la única que entrega a sus alumnos. No les explica por qué la composición es mala, cuando otras, pasibles de la misma crítica son buenas. Y mucho menos aprenden de los dos tipos de hombre que, respectivamente, son impermeables a este tipo de escritura o pueden ser afectados por ella: el que de verdad conoce y ama los caballos, no con ilusiones antropomórficas, sino con amor común; y el irremisible imbécil urbano para quien un caballo es sólo un anticuado medio de transporte". C.S. Lewis, La abolición del hombre, E.d Andrés Bello, Santiago, pág 19.
     La indignación de Lewis, es plenamente comprensible al leer la superficialidad del texto en cuestión. De hecho, en esta primera conferencia expresa su indignación con ironías, pero a la vez con la fuerza de la palabra expresada verbalmente. ¿ Qué clase de educación puede ser esa que se expresa  a través de pura verborrea barata?, ¿ qué pueden aprender los niños de todo esto? La verdad es que muy poco o casi nada. Si el fin del modelo inglés de la época de Lewis era fomentar la lectura, más vale no leer, que leer tonteras.
     Todo esto me hace recordar mi visita a las librerías de los grandes mall. Se muestran una gran cantidad de libros hermosamente empastados, con una gráfica excepcional. Pero partiendo del contenido rimbombante de los títulos deja mucho que desear. Realmente estos libros son huecos, vacíos sin estructura lógica ni menos metafísica de la realidad. Se dicen muchísimas palabras cliché, con el fin de manejar la emocionalidad de los lectores, pero no se fomenta su capacidad de análisis ni menos se satisface su deseo de saber. Todo ha sido llevado al plano de la simple emotividad.
   El lector moderno, es un lector muy sensible y dado mucho a buscar la literatura cebolla. Yo diría que la gente lee mucho ahora, pero lee muchas porquerías. Creo que Lewis fue visionario frente a la crisis del sistema educativo moderno. Vio en un par de textos, toda la literatura mercantil que iban a ser víctimas las generaciones futuras dentro de las cuales me incluyo.
    

miércoles, 18 de julio de 2012

Vinum laetificat cor hominis


          Yo no sé si tomarse un buen vino lleve al hombre a encontrar un momento de felicidad. Pero es innegable que tomarse una copa de vino cada cierto tiempo tonifica el cuerpo. Siempre recuerdo un caso ocurrido en el norte de Chile, cuando un sacerdote fue sorprendido por Carabineros conduciendo en estado de ebriedad. Al verse sorprendido el cura se excusó diciendo que había tenido en ese día alrededor de cinco bautizos, tres misas y no recuerdo bien si un velatorio.
       Más allá de lo anecdótico que resulte el caso anterior, el consumo del vino es una costumbre de miles de años. Evidentemente, las borracheras a nada bueno conducen. Y no es válido decir que se maneja mejor con una copas de vino de más en el cuerpo. O que yo trabajo mejor emborrachado. Eso es imposible.
   Una conversación de amigos tomando un buen vino puede ser de mucho provecho para profundizar una buena amistad. Pero consumir vino de manera exagerada puede llevar a la persona a causar grandes males que tal vez sana y buena nunca hubieran sido posible de concretarse. Las consecuencias del mal uso en el consumo del vino  no pueden ser válidas como excusas frente a la consumación de tal o cual delito.
   Hay personas que excusan su homosexualidad cuando se embriagan. Eso no es así, se deshíben producto de su borrachera, pero no por causa del grado alcohólico del vino. Las conductas deshonestas no pueden ser atribuídas en modo alguno a tan noble elemento producido de la tierra.
    Debo confesar que de muy niño sentía mucha repulsión al sólo olor al vino. Ya cuando grande aprendí a valorarlo en su justa medida.  He conocido personas que sueñan con tener un viñedo y vivir en él. Les encantaría tener bodegas de piedra llenas de barriles de roble, y al rededor una inmensa casa con una familia enorme. Esto les inspira un cierto aire de romanticismo y de bienestar económico. Y de hecho, la mayoría de la gente que tiene grandes fortunas siempre tienen a su haber la poseción de uno o varios viñedos.
  Dicen que hace muy bien para la salud del cuerpo tomarse una copa de vino tinto a la hora de almuerzo. No tengo suficientes antecedentes para negar o afirmar tal posición. Pero sí tengo la experiencia personal de ver a mi papá- ya en sus ochenta años lúcidos- y con buen estado de salud, tomar vino tinto desde que tengo uso de razón. Y el hombre no los tomaba en cantidades menores, en cada evento social que asistía siempre salía con muchas copas de más. Jamás lo ví hacer deporte alguno, ni menos cuidarse que tipo de comida comer. Su vino tinto al parecer siempre fue su único "cuidado".
   No pretendo en éste post hacer una apologética del vino, que para muchos es un vicio terrible. Sólo quiero reflexionar un poco hacerca de los mitos y realidades que se tejen entorno a él. De hecho, me carga estar junto a gente borracha. Me produce un tremendo desagrado. Pero para tomar vino no hay para qué emborracharse.
  Cuando era niño en la casa de un amigo me dieron un poco de vino herbido con naranja que encontré bastante rico, pese a mi rechazo en la infancia del sólo olor de este producto. Nunca he sido un catador de vino, pero sé distinguir un mal vino de uno bueno, por la textura y el olor. Pero como en gusto no hay nada escrito, la aseveración anterior no corre. Cada uno sabrá que vino toma, el punto es que lo tome con moderación y en una sana conversación.
   Y para que no sueñen con vino después de leer este post, debo decirles que mi bebida favorita es el jugo de chirimoya y de frambuesas.
   

martes, 17 de julio de 2012

Job 3


     "  Milicia es la vida del hombre sobre la tierra;
        como los del jornalero son sus días. Como el
        siervo suspia por la sombra, y como el jornalero
        espera su salario; así heredé meses de calamidad,
        y noches de dolor me tocaron en suerte. Si me acuesto
        digo: " ¿cuándo me levantaré?"
        Mas la noche es larga, y me canso, dándome vueltas
        hasta el alba. Mi carne está cubierta de gusanos y de
        una costra de barro; mi`piel se rompe y se deshace. Mis
        días pasan más ligero que la lanzadera, y desaparecen sin esperanza.
        Acuérdate de que mi vida es un soplo; mis ojos ya no verán la felicidad.
        No me verá más el ojo del que ahora me ve.; apenas tus ojos me ven,
        y ya no subsisto. La nube se disipa y pasa; así no sube más el que
        desciende al sepulcro. No volverá más a su casa, ni le reconocerá
        su lugar. Por eso no refrenaré mi lenguas, hablaré en la angustia
        de mi espíritu, me quejaré en la amargura de mi alma. ¿ Soy yo
        el mar o algún monstruos marino, para que me tengas encerrados
        con guardias?
        Cuando digo: " Mi lecho me consolará, mi cama aliviará mi pesar.
        entonces me aterras con sueños, y me espantas con visiones. Por
        eso prefiero ser ahogado, deseo la muerte para éstos  mis huesos.
        Tengo asco; no quiero vivir más; déjame, ya que mi vida es un soplo.
         ¿ Qué es el hombre, para que tanto le estimes,
         y fijes en él tu atención, para que le visites cada mañana,
         y a cada mosmento le pruebes?¿ cuándo cesarás de mirarme,
         y me das tiempo para tragar mi saliva? Si he pecado, ¿ Qué te he hecho
         con eso oh guardador de los hombres? ¿ Por qué me pones por blanco a mí,
         que soy una carga para mí mismo? ¿ Por qué no perdonas mi pecado
         ni borras mi iniquidad? Pues pronto me dormiré en el polvo; y si me buscas
         ya no existiré."

          DIOS FINALMENTE INTERVIENE
         
          " Entonces Yahvé respondió a Job desde el torbellino y dijo:
            ¿ Quién es éste que obscurece mis planes con palabras insensatas?
             Ciñe ahora los lomos como varón; que Yo te preguntaré, y tú me
             instruirás. ¿ Dónde estabas tú cuando Yo cimentaba la tierra?. Dilo
             si tienes inteligencia. ¿ Quién le trazó sus dimensiones-tú lo sabes seguro-
             o quien extendió sobre ella la cuerda?¿ En qué se hincan las bases, o quien
             asentó su piedra angular, mientras cantaban en coro las estrellas de la mañana,
             entre los aplausos de todos los hijos de Dios.?
              ¿ Quién cerró con puertas el mar, cuando impetuoso salía del seno?
              al ponerle Yo las nubes por vestido y las tinieblas por envoltura; imponiéndole
              mi ley y poniendo barras y puertas, con estas palabras: " hasta aquí llegarás,
              y no pasarás más allá: y ahí se quebrantará el orgullo de tus olas.

              ¿ Acaso en algún momento de tu vida has dado tú órdenes a la mañana, señalado
               su lugar a la aurora, para que ocupe los cabos de la tierra, y sean expulsados de
               ella los malhechores? Cambia ella su forma, como la arcilla del sello, y se presenta
               como un vestido nuevo, privando de su luz a los malvados, y quebrando el brazo
               levantado. ¿ Penetraste tú hasta las fuentes del mar; te paseaste en el fondo del abismo?
               ¿ Se te han abierto acaso las puertas de la muerte, y has visto esas puertas tenebrosas?
                Ya que has investigado la tierra en toda su anchura, habla si todo lo sabes.
                ¿ Donde está el camino que conduce a la morada de la luz? y el lugar de las tinieblas
                , ¿dónde se haya? ya que tú las conduces a sus dominios, y conoces los senderos que
                llevan a su morada. Tú debes saberlo, porque habías nacido ya entonces, y el número de tus
                es tan grande.
                ¿ Penetraste tú acaso en los depósitos de la nieve, y viste los almacenes del granizo,
                 que Yo he guardado para el tiempo de la angustia, para el día de la batalla y del combate?
                 ¿ Por qué camino se difunde la luz y marcha el solano sobre la tierrra?

             Comentario:    Dios hace una crítica amorosa al pobre Job. Dios pregunta: ¿ quién es éste que obscurece mis planes con palabras insensatas. El pobre Job preso de la debilidad humana, empieza en medio del dolor a ver la vida como una desdicha. El quisiera nunca haber existido. Caemos lamentablemente en los díalogos internos del alma que oscurecidos del ambiente externo nos llevan a centrarnos sólo en nuestro Yo. Somos nosotros y el dolor que padecemos. Frente al dolor tenemos sólo dos tipos de respuestas. O nos encerramos en el yo y maldecimos todo cuanto nos rodea, o nos abrimos a Dios a pesar de nuestra debilidad y incertidumbre frente a todo lo que va a venir por delante.
     ¿ Cuál es en el fondo la verdadera prueba? La confianza absoluta en el Dios providente. En situaciones extremas, Dios nos pone a prueba esperando de nosotros nuestra confianza en su omnipotencia. Los que se mantienen firmes en la prueba son aquellos que han construído su casa sobre roca. La roca es la fe en Dios y la casa es la confianza del alma en su creador.
     Dios nos muestra que el hombre es una creatura incapaz de conocer los misterios insondables que Dios mismo nos tiene preparados para nuestro bien. Dios le pregunta al hombre si él es capaz de conocer los caminos que nos llevan a la luz. En el fondo, Dios le muestra al hombre que es una criatura en medio de una obra trazada por el omnipotente. Frente a los planes de Dios, sólo queda la confianza absoluata que todo será para nuestro bien.
   Pero los hombres somos porfiados, siempre intentamos por nuestros propios medios de sacar los obstáculos que se nos ponen delante. Muchas veces nos olvidamos que todo lo hemos recibido por puro beneplácito del Dios que nos ama. Nuestra precariedad espiritual muchas veces nos juega una mala pasada. Lamentablemente, muchos como nosotros sabemos que existe un cielo, pero nos olvidamos que ese cielo no está en este mundo. Y cometemos el gran error de querer construir la felicidad en el aquí y en el ahora. Huímos del dolor y de la muerte disfrazando esta última a través de cementerios que parecen canchas de Golf en vez de lugares santos de descanso de los que ya partieron a la eternidad.
     Lamentablemente, en nuestra vida moderna nadie nos enseña a llevar el dolor con dignidad y trascendencia. Somos hijos de un mundo cobarde. Somos cobardes porque nadie ni nosotros queremos mirar al dolor como una señal de purificación de nuestra alma.
    Trabajamos todo el día para buscar las máximas comodidades para nuestra vida. Pero no trabajamos todo el día para atesorar el cielo. Nuestra traslocación valórica de intereses nos está jugando una mala pasada. Como cada cual busca su bien particular, el mal se difunde por el mundo sin ningún tipo de contencción.
   Los asesinatos con signos diabólicos aparecen por todas partes en el mundo. El hombre es malo, pero no al grado de asesinar a otro a sangre fría y luego descuatizarlo. Mientras más insensibilidad se muestre ante el dolor, el alma se vuelve menos humana y más diabólica.
   La gran  enseñanza que nos deja el  libro de Job, es la confianza que le tenemos que tener a Dios. Luego de pasado la prueba, Dios nos devolverá con creces todo lo perdido.
  
    " Después Yahvé restableció a Job en su primer estado, mientras éste oraba por sus amigos; y Yahvé dió a Job el doble de todo cuanto había poseído. Le visitaron también todos sus hermanos y todas sus hermanas, y sus antiguos amigos, y comieron con él en su casa.  Se condolieron con él, y le consolaron por todos los males que Yahvé le había enviado, dándole cada uno una Kesita y un anillo de oro.
     Yahvé bendijo los postreros tiempos de Job más que los primeros, y llegó a tener catorce mil ovejas, seis mil camellos, mil yuntas de bueyes y mil asnas. Tuvo tuvo también siete hijos y tres hijas. A la primera le puso por nombre Jemimá, y a la segunda Kesiá, y a la tercera, Keren Happuk. No se hallaron en toda aquella tierra mujeres tan hermosas como las hijas de Job; y les dió su padre herencia entre sus hermanos. Job vivió después de esto ciento cuarenta años; y vió a sus hijos y a los hijos de sus hijos hasta la cuarta generación. Y murió Job anciano y colmado de días."

      Así paga el Señor a los que le son fieles hasta el final. A Él la gloria y el honor por los siglos de los siglos. Amén.
   
 

         

domingo, 8 de julio de 2012

Job 2

             JOB ES PRIVADO DE SUS BIENES:
            " Ahora bien, mientras un día sus hijos y sus hijas estaban comiendo y bebiendo vino en casa de su hermano mayor, llegó un mensajero a Job y dijo: " Estaban los bueyes arando, y las asnas paciendo junto a ellos, cuando cayeron sobre ellos los sabeos y se los llevaron, pasando a cuchillo a los siervos. Y yo  sólo he escapado para traerte la noticia."
              Todavía estaba este hablando cuando llegó otro, que dijo: " Fuego de Dios ha caído del cielo, que abrazó a las ovejas y a los siervos, devorándolos; yo sólo he podido escapar para traerte la noticia."
              Todavía estaba éste hablando, cuando vino otro, que dijo: " Los caldeos, divididos en tres cuadrillas, cayeron sobre los camellos y se los llevaron. Pasando a cuchillo a los siervos; y yo sólo he escapado para traerte la noticia.
              Aun estaba éste hablando cuando entró otro y dijo: " Mientras tus hijos y tus hijas estaban comiendo y bebiendo vino en casa de su hermano mayor, sobrevino del otro lado del desierto un gran viento, que sacudió las cuatro esquinas de la casa, la cual cayó sobre los jóvenes, que quedaron muertos; y yo sólo he escapado para traerte la noticia."
             EN LA ADVERSIDAD JOB BENDICE A DIOS:
       " Entonces Job se levantó, rasgó su manto y rsapóse la cabeza. Y postrado en tierra adoró, y dijo: " Desnudo salí de las entrañas de mi madre y desnudo volveré allá. Yahvé lo ha dado, Yahvé lo ha quitado. ¡ Sea bendito el nombre de Yahvé!. En todo esto no pecó Job, ni dijo palabra insensata contra Dios.
          JOB   HERIDO CON UNA PLAGA MALIGNA :                    
       " Sucedió que un día se presentaron los hijos de Dios delante de Yahvé, y en medio de ellos vino también Satanás a ponerse en su presencia. Dijo Yahvé a Satanás: " ¿ De dónde vienes'" Satanás respondió a Yahvé y dijo : Acabo de dar una vuelta por la tierra y pasearme por ella." Preguntó Yahvé a Satanás: " ¿ Has reparado en mi siervo Job?, pues no hay ninguno como él en la tierra, varón perfecto y recto, temeroso de Dios y apartado del mal, que persevera en su integridad, aunque tú me has incitado contra él , para perderle sin causa." Respondió Satanás a Yahvé y dijo: " Piel por piel; porque todo cuanto tiene el hombre lo da por su vida. Pero anda, extiende tu mano y toca su hueso y carne, y verás cómo te maldice en la cara". Dijo, pues, Yahvé a Satanás: " He aquí que en tu mano está, pero consérvale la vida."
        Salió, pues, Satanás de la presencia de Yahvé, e hirió a Job con una úlcera maligna, desde la planta de los pies, hasta la coronilla de la cabeza. Entonces éste sentado sobre ceniza, tomó un casco de teja para rasparse con él( la podredumbre). Sumujer le dijo: ¿ Todavía perseveras en tu rectitud? ¡ Maldice a Dios, y muérete!". Más él le dijo: " Hablas como una mujer necia. Si hemos aceptado el bien de  parte de Dios, ¿ no hemos de aceptar también el mal?" En todo esto no pecó Job con sus labios."
         VIENEN LOS AMIGOS DE JOB:
       " Cuando los tres amigos de Job, Elifaz temanita, Bildad suhita Sofar naamatita, supieron toda esta calamidad que le había sobrevenido, vinieron cada uno de su lugar, porque habían concertado ir a darle el pésame y consolarlo. Mas cuando desde lejos alzaron los ojos no lo reconocieron; por lo cual levantaron su voz y lloraron; y rasgando cada uno su manto, esparcieron polvo por el aire sobre sus cabezas; y quedaron con él sentados en tierra siete días y siete noches, sin hablarle palabra; pues veían que su dolor era muy grande."
         JOB DISCUTE CON SUS AMIGOS:
    "  Después de esto abrió Job su boca y maldijo el día de su nacimiento. Tomando Job la palabra dijo: " Perezca el día que nací, y la noche que dijo: Ha sido concebido varón. Conviértase ese día en tinieblas; no pregunte por él Dios desde lo alto, ni resplandezca sobre él la luz.
      Oscurézcanlo tinieblas y sombra de muerte;
      cúbralo densa niebla,
      sea espantosa la neblura de aquél día.
      Apodérese de aquella noche de oscuridad;
       no se mencione entre los días del año,
      ni se registre en el cómputo de los meses.
      Cuéntese aquella noche entre estériles,
      en que no se oye canto de alegría.
      Maldíganla  los que saben maldecir los días,
      los que saben despertar a leviatán.
      Eclípsesen las estrellas de sus albores;
      espere la luz, que nunca le venga,
      no vea jamás los párpados de la aurora;
      por cuanto no cerró las puertas del seno
     y no ocultó a mis ojos los dolores.
     ¿ Por qué no morí en el seno de mi madre,
      ni expiré al salir de sus entrañas?
      ¿Por qué me acogieron las rodillas de mi padre,
      y los pechos para que mamara?
       Pues ahora reposaría yo en el silencio, dormiría. Y así
       tendría reposo, con los reyes y consejeros de la tierra,
       que se edificaron mausoleos, o con los príncipes que tenían oro,
       y llenaron sus casas de plata; o no existiría como aborto secreto,
      como los niños que no llegan a ver la luz.
       Allí los malvados cesan de hacer violencia, descansan los fatigados,
       gozan los cautivos todos de paz, no oyen ya la voz del sobrestante.
        Allí se hallan chicos y grandes, y también el siervo libre de su amo.
        ¿ Por qué conceder luz a los desdichados,
        y vida a los amargos de espíritu?
        A los que esperan la muerte que no viene,
        aunque la buscan, cavando con más empeño que un tesoro.
         Se alegran con júbilo y son felices al hallar el sepulcro.
        ¿ por qué dar vida al hombre cuyo camino está encubierto,
         y a quien Dios tiene cercado?.
         En vez de comer me alimento con suspiros,
         y mis gemidos se derraman como agua.
         Lo que temía, eso me ha sucedido, y lo que se recelaba, eso me ha sobrevenido.
         Estoy sin tranquilidad, sin paz, sin descanso, se ha apoderado de mí la turbación."

     Comentario:  Quisiera partir este comentario hablando de una experiencia personal muy fuerte que me tocó vivir hace muy poquito. Fui puesto a prueba por Dios de una manera un poco brusca desde mi perspectiva humana. Apenas se me puso contra la espada y la pared, experimenté el miedo y mi cuerpo experimentó un congelamiento sistemico. Incluso pensé en no seguir más con el blog. Tal fue la prueba que pensé por un momento tomar el camino más fácil y sacarme el problema de la manera más humana posible, pero contraviniendo abiertamente las leyes de Dios. Sin embargo, pese a mi debilidad humana, opté por el bien. Seguí el camino que Dios quería que siguiera. Una vez que rechacé el camino fácil . Dios despejó la prueba. Y finalmente, los peligros pasaron, y todo volvió a la normalidad.
       En esta prueba aprendí muchas cosas. La primera, que por la boca muere el pez. Una cosa es sostener una posición teológica sentado detrás de un computador con una taza de café bien caliente. Y otra, es estar en el ojo del huracán. Lamentablemente para nosotros, los católicos teóricos no existen. O se actúa como Dios manda o se lo desobedece para obedecer al hombre y enterrar el alma en la fugacidad del mundo.
   Me di cuenta que era extremadamente débil. Perdí en la aflixión las ganas de rezar. Y sin embargo, pese a mi debilidad y pesimismo, Dios nunca me abandonó. Las palabras miedo, cansancio y tedio, nos son agenas a mi. Me toca vivirlas a diario. Sin embargo, nuestra esperanza en el cielo nunca debe morir. ¡ Ay Señor Jesús, apíadate de nosotros, miserables creaturas! Vivir sin la piedad de Dios es practicamente cavar nuestra propia tumba.
    Que curiosa es la vida del cristiano. Dios lo purifica con la tribulación. En el caso del pobre de Job, el era un hombre santo y recto, de hecho el texto lo repite muchas veces. Algunos piensan que la figura de Job era la prefugura de Nuestro Señor. En lo particular, esto no me queda tan claro. ¿ Pero qué necesidad tenía Dios de probar a un santo? Nosotros los grandes pecadores merecemos ser probados y purificados por nuestras omisiones y acciones contrarias a Dios. Pero un hombre santo, ¿para qué?
   Sin embargo,  Job fue probado a través de una gradualidad de pruebas, llegando al punto de renegar su propia existencia. Job llegó a maldecir el día que nació, su debilidad y fragilidad humana lo llevaron a ver como un bien la posibilidad de nunca haber existido. Y claro, si uno está sufriendo dolor y desampararo constante no puede ver como un bien per se la vida. A pesar de su renegación de la existencia, el nunca maldice a Dios. Sólo desea no haber existido o a lo mejor dejar de existir. Job no era masoquista, no se gozaba con su propio dolor. Veía además de manera incomprensible para él, como los que lo rodeaban experimentaban una cierta paz y tranquilidad que el mismo carecía.
      ¿ Cómo puede ser un hombre justo aquel que siente desesperación e intranquilidad para el alma?, ¿ Dónde está la capacidad del autodominio del justo?, ¿ Por qué un hombre justo siente miedo y turbación? ¿ Qué les queda  a los débiles si el justo se aflige? Justo o no, el dolor a todos nos duele, a todos nos perturba el espíritu, y todos lo sentimos con fuerza en nuestra alma.
    La diferencia del hombre justo respecto al impío está en la respuesta desde lo más recóndito del alma. El justo podrá renegar de su existencia, podrá ver como un bien la no existencia. Pero jamás renegará de Dios, su Creador. El impío, maldecirá a su Dios, de su lengua saldrán berrinches contra todo lo santo. En él jamás habrá, una cierta anuencia que todo su padecer es para su purificación.
   Nuestra respuesta frente a las vicisitudes de la vida, va a ser en definitiva la vía que nos lleve al cielo o al infierno.
  
   

El bien, el mal y la voluntad humana, de Übersetzer a Chester

Transcribo para los lectores del blog este aporte de Übersetzer quien desde la psicología responde a la cita  que realizara Chester de Santo Tomás.
Fray Agrícola.

La fuerza de voluntad
En su comentario del l 1 de Julio respecto al origen del mal, G. Chester citando a Santo Tomás,  señala:
[para el hombre]…a diferencia de los cuerpos naturales, por mucho que lo exterior incite a lo sensible, en la voluntad está el poder de no recibirlo, de donde la causa del mal consiguiente no es el deleitable que mueve, sino la voluntad misma.
Hoy en día vemos con qué facilidad cedemos a nuestros impulsos y a nuestra voluntad, producto, probablemente, de que cada vez con menos frecuencia enseñamos a los niños el valor de la auto-disciplina o el auto-control en forma consciente. Muchos nos preocupamos más de que ‘no les falte nada’, de ‘que sean felices’, sin darnos cuenta que podemos estarlos privando de una herramienta que les será fundamental en su juventud y su vida adulta. De hecho, estudios en el último medio siglo demuestran la importancia de saber ejercer el autocontrol.
El autocontrol visto por la psicología*
En forma casi paralela, psicólogos investigadores de la Universidad de Pensilvania, la Universidad George Mason, la Universidad de Duke y la Universidad de Columbia realizaron estudios experimentales para medir el autocontrol en niños y adolescentes, efectuando en algunos casos, seguimientos hasta la adultez de los sujetos. Los expertos descubrieron, a grandes rasgos, que:
-los puntajes de autocontrol van de la mano con mayores promedios académicos, mayor autoestima, menos hábitos compulsivos y mejores habilidades interpersonales
-la autodisciplina es más importante que el coeficiente intelectual como factor para predecir el éxito académico
-quienes presentan mayor autocontrol en su niñez llegan a ser adultos física y mentalmente más sanos, menos propensos al abuso de sustancias y con mayor seguridad financiera
- mejor autocontrol implica también mayor capacidad para planificar, manejar el estrés, responder a argumentos racionalmente, mostrar autocontrol en situaciones frustrantes y concentrarse sin que las distracciones nos afecten.

Walter Mischel, PhD, psicólogo de la Universidad de Columbia, describe la fuerza de voluntad como la capacidad para postergar la satisfacción. En lo concreto, esto se traduce en un fumador que renuncia al cigarrillo para evitar cáncer de pulmón en el futuro, alguien que se priva de hacer ciertas compras para poder ahorrar y aumentar mensualmente su jubilación, etc. Del mismo modo, un estudiante organiza su semana distribuyendo horas de estudio, disminuyendo el tiempo dedicado a la entretención, dejando de lado la tentación del internet, de modo de lograr un mejor rendimiento académico, o un profesional que se queda trabajando media hora más para terminar la tarea que tiene entre las manos de modo de evitar la pérdida de tiempo que al día siguiente le tomaría volver a enfocarse en lo que estaba haciendo el día anterior, perdiendo eficiencia. 

Mischel explica porqué la fuerza de voluntad triunfa o fracasa mediante lo que llama el sistema frío y el sistema caliente. El sistema frío es el aspecto esencialmente cognitivo que nos recuerda por qué no debemos comer un segundo plato, o dedicar más tiempo de que nos habíamos permitido inicialmente para tomar un descanso, en base a conocimiento de sensaciones, sentimientos, acciones y metas. Es un sistema reflexivo.
El sistema caliente, impulsivo y emocional, es responsable de las respuestas rápidas y automáticas a ciertos estímulos sin considerar las implicaciones futuras. Al fallar la fuerza de voluntad, la exposición al estímulo ‘caliente’ prima y cedemos al impulso, obteniendo gratificación inmediata pero con consecuencias que lamentar posteriormente. La sensibilidad a los estímulos caliente parece persistir a lo largo del tiempo, requiriendo mayor fuerza de voluntad para rechazarlos.
 

La voluntad y la energía 

Además de un esfuerzo cognitivo, el ejercer nuestra fuerza de voluntad requiere un gasto de energía. Pruebas realizadas en laboratorio demostraron no solo menores niveles de glucosa en aquellos sujetos que habían ejercido autocontrol, sino que  el restaurar dichos niveles de energía tuvo un efecto renovador sobre la fuerza de voluntad.

Los estudios experimentales también probaron que el agotamiento de la fuerza de voluntad se puede regular por medio de creencias y actitudes. Expertos de la Universidad de Albany demostraron que quienes deben ejercer el autocontrol para complacer a otros o por actuar de acuerdo a lo socialmente establecido ven su autocontrol más fácilmente agotado que quienes actúan motivados por sus propias metas y deseos internos. En forma similar, el buen estado de ánimo tendría una incidencia positiva sobre la capacidad de  ejercer el autocontrol.

La fuerza de voluntad y el mal

De lo anterior se desprende que el aprender a controlar nuestra voluntad, educando nuestra disciplina interior y nuestro autocontrol nos ayudará a ser mejores personas desde todo punto de vista: físico, académico, profesional, interpersonal y, desde luego, espiritual.

El dominio de nuestros impulsos, y por ende, el recto ejercicio de nuestra libertad buscando siempre el bien superior, nos permitirá acercarnos al ser humano al que todos debiéramos aspirar. Al rechazar la tentación de actuar por impulso ante los estímulos sensibles, estaremos evitando el mal que conlleva dicha acción – en cualquier orden de cosas, desde la acidez por comer demasiado, al parte o el probable accidente por ver cuánto da en una recta nuestra ‘joyita’, a cometer adulterio por ‘mirar pal lado’.

Personalmente, sí me inculcaron de chica el autocontrol, y afortunadamente por estructura mental soy bastante controlada, por lo que resulta bastante lógico el asunto. No es el caso de gran cantidad de personas, a quienes, ya sea por soberbia o por falta de respeto por su propia dignidad, la fuerza de voluntad y el controlar sus impulsos les resulta completamente ajeno (remítanse a Decadencia, del 17 de junio), dejándose dominar por sus libertad individual, y cayendo en el más completo descontrol.

Reconozco con mucha humildad que si bien he logrado vencer (y a veces, solo esporádicamente) en algunos aspectos relativos al autocontrol, aún me queda mucho camino por recorrer, pero peldaño a peldaño se llega a la cima.

Conocer la meta, sin embargo, es un comienzo. La motivación de la vida eterna debiera ser suficiente aliciente interno (como señalan los estudios en psicologia) para mantener el nivel de esfuerzo. Y no olvidemos el estado de ánimo. No nos dejemos vencer por la tristeza y la desesperanza. En la medida que nos dejemos acompañar por María, descansando en su fuerza y pidiendo su intercesión para fortalecer nuestra fe, todo será posible. 

Saludos cordiales,
Übersetzer


*Lo que debemos saber sobre la fuerza de voluntad: la ciencia psicológica del autocontrol fue escrito por Kirsten Weir. Copyright © American Psychological Association 2012


 

lunes, 2 de julio de 2012

Job 1


          " Había en tierra de Us un varón que se llamaba Job; era hombre perfecto y recto, temeroso de Dios y apartado del mal. Naciéronle siete hijos y tres hijas, y poseía siete mil ovejas, tres mil camellos, quinientas yuntas de bueyes, quinientas asnas, y muy numerosa servidumbre. Era así aquel hombre más poderoso que todos los orientales.
             Sus hijos solían visitarse el uno al otro en sus casas y celebrar banquetes, cada cual en su día, e invitaban también a sus tres hermanas a comer y beber con ellos. Concluído el turno de los días del convite, Job los hacía venir y los santificaba. Madrugando por la mañana ofrecía holocaustos conforme al número de todos ellos; pues decía Job: " Quizá hayan pecado mis hijos, y maldecido a Dios en sus corazones." Así obraba Job siempre."

       Comentario:  La tierra de Us, se presume que era un lugar cerca del mar Muerto. Aquí vivía Job, hombre perfecto y recto. El autor del texto hace hicapié en estas dos virtudes de Job: su perfección, que quiere decir a mi juicio, un hombre sin mancha, sin pecados que ofendan a Dios. Y su rectitud, apunta a que job era un hombre transparente en su actuar. En él no había un doble estándar.
        Job era como un niño inocente delante de Dios. Buscaba hacer sólo el bien. No había en él doble intención. Todo lo hacía para agradar a Dios. Era temeroso de Dios, es decir, obraba con amor y confianza. Job sabía que Dios siempre iba a obrar de la manera más misericordiosa.
       ¿Cuántos de nosotros llevamos nuestras vidas con esa absoluta confianza en Dios? Por algo no somos santos ni justos delante de Dios. Pero continuemos con el análisis del texto: En Job abundaban los hijos y los bienes materiales.  Aquí se nos muestra como signo de bendición la abundacia de la prole y la abundancia de bienes materiales.
     ¿ Será verdaderamente señal de bendición poseer tantos bienes?. Lo que más me queda claro en el texto es que por ser un hombre justo había recibido de Dios abundancia de bienes. Pero esa abundancia no se explicaba- tal como le ocurre al hombre burgués moderno- por una codicia del alma de Job. Todo lo había recibido por añadidura, después de amar a Dios. Por consiguiente, su riqueza obedecía al buen uso que el mismo Job hacía de ella. Primero buscaba el Reino de los Cielos, y todo lo demás se le daba por añadidura. Por lo tanto, no se puede afirmar categóricamente, que la riqueza per se sea signo de bendición o de condenación, de lo contrario, todos los hombres más ricos y poderosos de este mundo serían los más santos.
     La familia de Job era el ideal de familia. Sus hijos ya siendo grandes, eran muy cariñosos entre ellos. A cuantos de nosotros nos hubiera gustado tener hermanos que nos quisieran a tal punto que gozaran en nuestra compañía. El sentido de cercanía de los hermanos apunta que sus relaciones eran sólidas, basadas en el respeto y en el amor. ¡Oh  Señor, regálame una familia así!.
     Pero Job era un hombre sabio. Él conocía muy bien la naturaleza humana. Sabía que en estos encuentros familiares podían cometerse excesos o pecados. De allí su inquietud de bendecirlos después del convite, y ofrecer sacrificios a Dios por cada uno de ellos. Que amor más dulce de su parte, de preocuparse de la salvación eterna de sus hijos viejos. Eso muestra muy nítidamente que un verdadero padre debe morir preocupándose por el bienestar espiritual y material de sus hijos. En este caso era una preocupación espiritual.
      ¿ A cuántos de nosotros nos hubiera gustado tener un papá como Job?. Para los que son padres, o van a serlo, no se olviden de rezar día y noche por la salvación eterna de sus hijos. Sigan el ejemplo y sabiduría de Job. Recuerden que el pecado ronda permanentemente la vida de todos los hombres.

    DIOS DA A SATANÁS PODER SOBRE JOB:
  " Un día cuando los hijos de Dios fueron a presentarse delante de Yahvé, vino también entre ellos Satanás. Y dijo Yahvé a Satanás: " ¿ De dónde vienes?" Respondió Satanás a Yahvé y dijo: " Acabo de dar una vuelta por la tierra y pasearme por ella." Y preguntó Yahvé a Satanás: " ¿ Has reparado en mi siervo Job?, pues no hay ninguno como él en la tierra, varón perfecto y recto, temeroso de Dios y apartado del mal." Respondió Satanás a Yahvé, y dijo: " ¿ Acaso teme Job a Dios desinteresadamente? ¿ No le has rodeado con tu protección por todas partes a él, su casa y todo cuanto tiene?. Has bendecido la obra de sus manos, y su hacienda se ha multiplicado sobre la tierra. Pero anda, extiende tu mano y toca cuanto es suyo, y verás cómo te maldice en la cara."
       Dijo entonces Yahvé a Satanás: " He aquí que todo cuanto tiene está en tu mano; pero no extiendas tu mano contra su persona." Con esto se retiró Satanás de la presencia de Yahvé.
    
    Comentario: Los hijos de Dios son los ángeles. Uno de ellos era Satanás, que en Hebreo significa adversario. El Diablo o diábolos( calumniador), juega un rol clave en la salvación o condenación de los hombres. Satanás andaba recorriendo el mundo, buscando con su perfidia a quién devorar.
     Dios, que es el creador y que permite un cierto obrar de Satanás en el mundo, lo interroga. Le pregunta si se ha detenido sobre su siervo Job. Satanás, como buen envidioso del bien del hombre, le replica  a Dios que a Job lo motiva el hecho de esperar una retribución de Dios. En otras palabras, mancha el obrar de Job, diciendo que actúa más por conveniencia que por amor a Dios.
   ¿ Cuántos de nosotros tratamos de portarnos bien por la búsqueda de los premios eternos?, y nos olvidamos de lo más importante en el obrar: el amor a Dios. ¿Cúanta pureza nos falta?.  Señor, enséñanos amarte como Tú quieres que te amemos. Porque de verdad ninguno de nosotros es digno de Ti.
     El Príncipe de este Mundo no tiene poder sobre nada delo que hay en él. Todo su " poder" se debe a un permiso que Dios le da con el fin que las almas se purifiquen en medio de las adversidades de esta vida pasajera. Muchas de las enfermedades que padecemos son producidas a causa de la ingerencia de espíritus malignos.Dios les permite que obren en nosotros a fin de que depositemos toda nuestra confianza en Él.
    Dios le permite a Satanás que actúe sobre todos los bienes de Job, pero lo pone una sola condición. Satanás no podrá tomar la vida de Job, no podrá actuar contra su persona. Para ser merecedores de los bienes eternos, tenemos que poner de toda nuestra voluntad para poder alcanzarlos. Poner la voluntad no significa caer en un voluntarísmo ególatra de cumplir la ley porque somos tan dominadores de nosotros, que basta proponernos un fin para cumplirlo. No se trata de voluntarismo, ni se trata de quietismo perezoso. Se trata de abandonar nuestra voluntad para depositarla en las manos de Dios.       ¿ Somos capaces de abandonarnos a tal extremo de esperar que Dios actue? o simplemente, ¿creemos que somos capaces por nosotros mismos de alcanzar la felicidad y superar los obstáculos de nuestras vidas?.